martes, 13 de noviembre de 2007

Historia de trabajo práctico


5) Leer "El fuego del dragón" y producir un texto similar pero con otro ser sobrenatural que no sea un dragón.

Los cisnes comen pescados los días de lluvia. Y son felices. Tan felices como en esos días secos que no llueve. Porque ésas son las noches de lluvia.
Van bailando con su gracia propia solamente de garzas, y buscando pescados de la forma más elegante. Los juntan todos en su orilla y los preparan para comer.
Los cisnes aman los pescados. Les encantan las escamas, el olor y todo.
Son felices viendo caer la lluvia y las gotas que rebotan contra el piso y suben de vuelta, como desafiando toda ley de gravedad.
Esto pasa todo el día de lluvia.
Ningún cisne sabe la causa.
Y es mejor así.

1 comentario:

Tomás Aldanondo dijo...

Loco, tienen a la mejor profesora de lengua del colegio.
escribe con amor, tomas aldanondo, 2° E.